Lo que no cambiamos es la forma de entender el negocio, la filosofía del mismo. Vendemos artículos sobre lo que más sabemos.
Para nosotros, un cliente es un potencial compañero de ocio. Hoy está en la tienda, pero mañana podemos encontrarlo en la montaña o en el campo de tiro compartiendo con nosotros su tiempo libre; por lo tanto, su satisfacción es la nuestra.
Esa forma de ver nuestra empresa nos obliga a un cuidado muy especial en la selección del producto que ofertamos a nuestros clientes.